Estudiar vs. Aprender
"Estudiamos para aprender pero no siempre aprendemos estudiando".
Con esta frase quiero aportar un poco de luz al problema de algunos alumnos sobre para qué van a la escuela, ¿van a estudiar o a aprender? Para ellos es lo mismo y parece que nadie les da una respuesta satisfactoria.
Partamos desde la base de que no es lo mismo informarse que formarse dado que para estar formado en algo, no basta tener datos a disposición de un tema (información), sino que se deben realizar procesos de aprendizaje en los cuales se asimila el saber nuevo a un conocimiento anterior.
La formación en una profesión implica además otras cosas que solo estudiar conceptos, como por ejemplo el lado ético de una profesión; de modo que la formación en un título de FP comienza con el aprendizaje pero creo que nunca termina.
Se suele aconsejar a los alumnos que es conveniente tomar una actitud permeable para comenzar a reflexionar sobre los modos de aprender y las principales actividades a desarrollar.
Se abre un espacio para adquirir hábitos nuevos de aprendizaje con otras expectativas y dificultades y habrá que dejar atrás en muchos casos, modos que ya no nos sirven, como los de Secundaria, para afrontar los desafíos de acceder al conocimiento científico práctico.
"aprender es un proceso de adquisición y cambio referido a conceptos"
(LEITTE, Analía y ALCALÁ, María Teresa. (2000). "Módulo: Aprendizaje y Estudio en la Universidad", Curso de apoyo al Ingresante, Programa UNNE-Virtual, UNNE, Corrientes)
Aprendemos de todas nuestras experiencias de vida y durante toda la vida. Sin embargo, aprender y estudiar no son sinónimos, sino que la actitud de estudiar es un proceso que facilita el aprendizaje, implica una actitud del estudiante en la que, por ejemplo, implica saber buscar y organizar información; manejar ciertas estrategias y técnicas.
El estudiar puede garantizar el aprendizaje, pero no es suficiente para producirlo. Estudiar mucho no es sinónimo de aprender mucho. Estudiar implica saber manejar, desmenuzar y trabajar la información (además de que cada persona define sus modos y no existe receta válida para todo el mundo, cada uno frente a la situación define el modo que se siente más cómodo al estudiar).
Aprender, por su parte, implica recuperar lo estudiado, retrabajarlo, relacionarlo con otras cosas que sabemos. Necesita de tiempo para pensar, para discutir, para explicar, para escribir o producir, interactuar con otros, trabajar en equipo, plantear posiciones y argumentar. Aprender implica entonces problematizar el contenido desde diferentes lugares: supuestos teóricos, hipótesis, tesis, etc. Si dicha problematización no existe es difícil que ocurra el conflicto cognitivo.
Confío en que la lectura, si no aclara el tema por lo menos sirva para dar alguna pista para alcanzar la meta de cualquier alumno: aprobar.
Con esta frase quiero aportar un poco de luz al problema de algunos alumnos sobre para qué van a la escuela, ¿van a estudiar o a aprender? Para ellos es lo mismo y parece que nadie les da una respuesta satisfactoria.
Partamos desde la base de que no es lo mismo informarse que formarse dado que para estar formado en algo, no basta tener datos a disposición de un tema (información), sino que se deben realizar procesos de aprendizaje en los cuales se asimila el saber nuevo a un conocimiento anterior.
La formación en una profesión implica además otras cosas que solo estudiar conceptos, como por ejemplo el lado ético de una profesión; de modo que la formación en un título de FP comienza con el aprendizaje pero creo que nunca termina.
Se suele aconsejar a los alumnos que es conveniente tomar una actitud permeable para comenzar a reflexionar sobre los modos de aprender y las principales actividades a desarrollar.
Se abre un espacio para adquirir hábitos nuevos de aprendizaje con otras expectativas y dificultades y habrá que dejar atrás en muchos casos, modos que ya no nos sirven, como los de Secundaria, para afrontar los desafíos de acceder al conocimiento científico práctico.
"aprender es un proceso de adquisición y cambio referido a conceptos"
(LEITTE, Analía y ALCALÁ, María Teresa. (2000). "Módulo: Aprendizaje y Estudio en la Universidad", Curso de apoyo al Ingresante, Programa UNNE-Virtual, UNNE, Corrientes)
Aprendemos de todas nuestras experiencias de vida y durante toda la vida. Sin embargo, aprender y estudiar no son sinónimos, sino que la actitud de estudiar es un proceso que facilita el aprendizaje, implica una actitud del estudiante en la que, por ejemplo, implica saber buscar y organizar información; manejar ciertas estrategias y técnicas.
El estudiar puede garantizar el aprendizaje, pero no es suficiente para producirlo. Estudiar mucho no es sinónimo de aprender mucho. Estudiar implica saber manejar, desmenuzar y trabajar la información (además de que cada persona define sus modos y no existe receta válida para todo el mundo, cada uno frente a la situación define el modo que se siente más cómodo al estudiar).
Aprender, por su parte, implica recuperar lo estudiado, retrabajarlo, relacionarlo con otras cosas que sabemos. Necesita de tiempo para pensar, para discutir, para explicar, para escribir o producir, interactuar con otros, trabajar en equipo, plantear posiciones y argumentar. Aprender implica entonces problematizar el contenido desde diferentes lugares: supuestos teóricos, hipótesis, tesis, etc. Si dicha problematización no existe es difícil que ocurra el conflicto cognitivo.
Confío en que la lectura, si no aclara el tema por lo menos sirva para dar alguna pista para alcanzar la meta de cualquier alumno: aprobar.
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